miércoles, 17 de febrero de 2010

Evolución

Para ser conscientes de los cambios hay que establecer un punto de referencia que nos permita comparar lo que somos ahora con lo que fuimos en un momento dado.

Las personas evolucionamos, y además lo hacemos en muchas y diferentes facetas. No siempre nos damos cuenta de ello, y tal vez solemos fijarnos más en unas cosas que en otras.Bien por evidentes, bien por el propio interés que despiertan en nosotros.

A menudo, este blog me sirve como marca sobre la que tomar medidas. Veo cosas que escribí, y recuerdo cómo me sentía en el momento de escribirlas, y a menudo me ayudan a relajarme a la hora de afrontar nuevos estados de ánimo. Por aquello de ver que las cosas, de un modo u otro, ni son para siempre, ni son tan rígidas como uno puede creer. Aporta positivismo a la hora de encarar el día a día.

Ahora tengo un puñado de proyectos en mente, y en este instante tengo la sensación de que son frágiles, complicados, inestables... Pero echando un vistazo a los post de hace aproximadamente tres años, puedo ver cómo imaginaba que saldrían las cosas, y lo complicado que parecía todo, y sin embargo aquí estoy.

Imagino que el proceso creativo depende en gran medida de la capacidad que tengas de inventar cosas. Pero también hay una componente de constancia, esfuerzo y cojones, que al final marcan la diferencia entre hacer cosas y no hacerlas. Y justo en eso estoy ahora, en mezclar todas estas componentes, a ver qué sale.

Lo que me gustaría es saber cómo han cambiado las cosas en aquellos aspectos que no soy capaz de percibir, y que a ratos me hacen sentir que no me entero de dónde estoy.